Lo embriagan y resaltan las vistas que se le revelan. Sube con pie seguro, sin pensar en lo que queda debajo, en caso de que se escurriera y perdiese el control, sino en lo que queda por delante. Todo queda por delante. El camino es infinito, y cuanto más lejos llegas, más se abre el camino. Las ciénagas y cenegales, los pantanos y sumideros, las trampas y celdas, están todos en la mente. Esperan al acecho, dispuestos para tragarte en el momento en que dejes de avanzar. El mundo fantasmal es el mundo que no se ha conquistado del todo. Es el mundo del pasado, nunca el futuro. Avanzar aferrándose al pasado es como arrastrar una bola y una cadena. El prisionero no es el que ha cometido un crimen, sino el que se aferra a su crimen y lo vive una y mil veces. Todos nosotros somos culpables de un crimen, el gran crimen de no vivir la vida al máximo. Pero todos somos libres en potencia. Podemos dejar de pensar en lo que no hemos hecho y hacer lo que esté en nuestro poder. Nadie se ha atrevido a imaginar de verdad qué pueden ser esos poderes que hay dentro de nosotros. Que son infinitos lo comprendemos el día en que reconozcamos ante nosotros mismos que la imaginación lo es todo. La imaginación es la voz de los atrevidos. Si hay algo divino en Dios, es eso. Se atrevió a imaginarlo todo.
Sexus, Henry Miller
Muchas gracias por esto, te amo
luli
ohhhhhhhhhhhhhhh
grrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr
si! gracias por hacerme leer este libro…que todavía no termine ejmmm…pero disfruto de cada palabra